El proceso sigue su curso
Por suerte, el proceso sigue su curso. Hay muchos altibajos pero continua sin cesar. Hay veces en los que tengo ganas de rendirme pero gracias a vuestro apoyo y en especial al de S. nunca he llegado a hacerlo.
Hoy vuelto a llorar como hacia tiempo. He vuelto a experimentar la sensación del nudo en la garganta y después he abierto el grifo de mis poco usados lacrimales. Ha sido, como no, recordando a mi tío, aquel que tanto ha aportado en mi vida. Algún día os contaré más cosas sobre él. Permitirme hoy que me lo quede reservado sólo para mi.
Cada vez vuelvo a estar más cercano a mi lado sensible, ese lado que dejé aparcado en algún lugar del cementario de Malagón. Hoy vuelvo a sentir más. Gracias a Dios (aunque no crea en él) y sobre todo gracias a todos aquellos que me estáis ayudando día a día a conocer un nuevo modo de vivir.
Lo dicho, el proceso sigue su curso y cada día queda menos para ver al verdadero Dani, aquel niño que lloraba por las hormigas muertas o porque alguien querido le había dado un beso de corazón.
1 comentario
NANA -